Los invitamos a leer la nota del Diario Financiero en que nuestro socio, Rodrigo Albagli, comentó sobre si se ha avanzado la prevención de Delitos Éticos en las empresas.
El 67% de los chilenos considera que la integridad en sus organizaciones ha mejorado en los últimos dos años. Así lo revela la Encuesta Global de Integridad de EY 2024, la cual menciona los avances hacia una regulación más estricta como uno de los factores tras esta mejora.
‘En los últimos años hemos sido testigos de cómo las empresas han tomado mayor conciencia de la integridad corporativa’, explica el socio líder de servicios forenses e integridad de EY, Jorge Vio, quien destaca que actualmente cada vez más empresas están invirtiendo en estructuras de cumplimiento y capacitación en integridad, y han publicado declaraciones de valores organizacionales o códigos de conducta. Esto, en su opinión, se debería principalmente a las normas más exigentes y a la gestión de la gerencia.
Vio describe que la entrada en vigor de la Ley 21.595 sobre delitos económicos y ambientales exige que el estándar de integridad en las organizaciones sea ‘serio y razonable’, con ‘modelos de prevención que estén vivos’, lo que, a su juicio, ha cambiado la lógica del ecosistema corporativo, impulsando a las empresas a analizar en profundidad cómo están realmente en materia de cumplimiento.
El asociado senior de Barros & Errázuriz, Francisco Vial, coincide con esta percepción y asegura que la nueva normativa ‘puede ser un factor importante que ha contribuido a la mejora en la percepción de la integridad y transparencia dentro de las organizaciones’, haciendo alusión a la ampliación del catálogo de delitos por los cuales una firma puede ser responsable penalmente.
‘El nuevo escenario normativo (…) ha generado que muchos directorios comiencen a involucrarse en cómo sus organizaciones mitigan riesgos y protegen su activo más relevante y frágil: su reputación‘, complementa el managing partner de Albagli Zaliasnik (AZ), Rodrigo Albagli, quien cree que el riesgo actualmente está en la efectividad de los modelos de prevención de delitos más allá del papel.