Nuestro director del Grupo Energía e Infraestructura, Federico Rodríguez, conversó con Diario Financiero sobre la Ley de Transición Energética y lo que viene para este 2025.
En enero se publicó en el Diario Oficial la Ley de Transición Energética (Ley N° 21.721), normativa que contempla una serie de modificaciones a la Ley General de Servicios Eléctricos para posicionar a la transmisión eléctrica como un sector habilitante para la carbono neutralidad. Que se concreten las obras necesarias y se agilicen los plazos está entre sus principales alcances, coinciden expertos en la materia.
Sobre los cambios que vienen, el socio de energía de Barros & Errázuriz, Cristóbal Pellegrini, detalla que la nueva norma incorpora un mecanismo que da mayor institucionalidad a la concreción de obras urgentes y necesarias. ‘Debemos ver cómo se implementa, pero lo esperable es que tengamos una participación expedita de la Comisión Nacional de Energía y del Coordinador Eléctrico Nacional para identificar estas obras y ordenar su licitación’, dice. Que la ampliación de obras existentes sea licitada por su propietario y que se puedan revisar los valores de adjudicación de la construcción de obras de ampliación, en casos excepcionales, también es un punto a favor, según su opinión.
El gerente de proyectos y desarrollos de Negawatt, Francisco Leiva, añade la agilidad que dará a los proyectos de transmisión de electricidad y destaca el foco en resolver los problemas de vertimiento solar y/o energía renovable que no se inyecta a la red eléctrica, junto con dar prioridad a proyectos de infraestructura crítica.
‘Abre nuevas oportunidades para robustecer y generar resiliencia de la red eléctrica, fomentar la participación de nuevos actores en los mercados energéticos regionales de nuestro país y masificar distintas tecnologías de almacenamiento de energía’, afirma Leiva.
Para el director de energía e infraestructura de Albagli Zaliasnik (az), Federico Rodríguez, la normativa es un avance significativo para fomentar inversiones en transmisión eléctrica, pero no resuelve completamente los problemas estructurales, como los tiempos de tramitación de permisos.
Desde la Agencia de Sostenibilidad Energética (AgenciaSE) coinciden en que los desafíos pasan principalmente por seguir acortando las brechas que existen en permisología, y añaden las brechas de capital humano en temas de energía, un asunto clave para el país: ‘Se requerirá seguir trabajando hacia la formalización de oficios claves y básicos en temas de electricidad y gas’, advierten.
Los reglamentos necesarios para su implementación deben ser dictados o modificados por el Ministerio de Energía dentro del plazo de un año, es decir, en diciembre. Asimismo, la Comisión Nacional de Energía (CNE) inició una consulta pública para recibir observaciones sobre las resoluciones reglamentarias asociadas, en particular la licitación de obras de ampliación por parte de propietarios y los mecanismos de revisión del valor de inversión adjudicado.